CREACIÓN DE TEXTOS LITERARIOS
A continuación, os voy a
presentar la siguiente entrada del blog. Esta entrada consiste en realizar
diferentes textos literarios para los niños. Antes de continuar, quiero
presentar que el cuento, va dirigido a todas las edades, ya que considero que
es un libro bastante entendible. Por otro lado, la creación en verso y la
creación dramática, va dirigido a niños entre 5 y 6 años. Ya que hay elementos
que quizás un niño de 3 años no está capacitado lo suficiente para hacerlo.
CREACIÓN DE PROSA.
La piedra de la juventud.
Era sé una vez, en un pueblo muy
lejano, vivía dos hermanos, cuyos nombres eran Javier y Hugo. Estos hermanos
vivían en una casa formada por un par de tablones de madera y unas telas rotas
a modo de techo. Eran muy pobres y no tenían apenas dinero para comer, solo
contaba con un mendrugo de pan y unas cuantas pasas secas. Es verdad, que con
el dinero que ganaban como carpinteros, se podían comprar más alimentos.
Un día los hermanos, cansados de
su pobreza, decidieron salir al centro del pueblo para ver si podían realizar
alguna hazaña y conseguir alguna recompensa del rey. Pero cuando llegaron, se
llevaron un chasco, ya que el tablón de anuncios estaba vacío. Los dos
hermanos, con una gran desilusión y con la cabeza agacha se fueron de vuelta a
casa. Pero de repente escucharon una especio de susurro.
Cuando volvieron la cabeza hacia
el lugar donde provenía el ruido, se encontraron con un sapo.
-
Hola chicos, he visto que estabais mirando con
curiosidad el tablón de anuncios del pueblo ¿Necesitáis dinero? – preguntó el
sapo.
-
Si, ¿A caso sabes tú alguna hazaña que podamos
realizar? – preguntó Hugo.
-
Pues la verdad que sí – afirmó el sapo.
-
Pues si conoces alguna aventura, ¡Cuenta con
nosotros! – dijo con entusiasmo Javier.
El sapo al escuchar esto, se puso
bastante contento ya que había encontrado a las personas perfectas para
ayudarle con su problema. El sapo les contó que él en realidad era el futuro heredero
del reino, pero que una malvada bruja le hizo un hechizo por venganza.
-
Pero ¿Cómo te podemos ayudar a que vuelvas a tu
aspecto natural? – preguntó Hugo.
-
Buena pregunta muchacho. Pues veréis, tenéis que
encontrar la roca de la juventud. Una vez encontrada, tenéis que convertirla en
polvo para echarlo en agua. Como recompensa, os convertiré en caballeros de mi
corte. Pero tener cuidado, porque solo tenéis tres días para encontrarla y en
el camino encontrareis muchas dificultades.
Una vez dicho esto, el sapo les
dio un mapa para que puedan los hermanos encontrar la piedra. Vieron que tenían
que pasar por dos lugares extraños: el río de los cocodrilos y el bosque de la
confusión. Los dos hermanos, decidieron empezar la aventura al alba del día
siguiente.
Cuando comenzó el nuevo día, los hermanos se
pusieron en marcha hacía el río de los cocodrilos. Cuando llegaron al río
vieron que tenían que cruzarlo mediante unas rocas verdes, que estaban sujetas a
la profundidad del rio.
-
¡Espera! No empieces a saltar todavía – exclamó
Javi.
-
¿Por qué? – preguntó Hugo.
-
No ves que estás rocas son un poco extrañas y
parecen como las escamas de…
Antes de que terminase Javi la
frase, de repente sale un cocodrilo gigante del agua. Los dos hermanos al ver
lo que sucedía, se fueron a esconder detrás de unos árboles que estaban al lado
de la orilla.
Allí se quedaron un buen tiempo,
pensando sobre lo que podrían hacer para cruzar el río. A uno de ellos, se le
ocurrió atar un poco de jamón de su almuerzo a una roca y lanzárselo al
cocodrilo. Cuando tuvieron el anzuelo hecho, Hugo, que era el hermano que tenía
mayor fuerza, lo lanzó por los aires, y el cocodrilo al verlo se fue corriendo
tras ello.
Una vez con el terreno despejado,
los hermanos cruzaron el rio a nado. Después de horas caminando hacia el bosque
de la confusión, decidieron acampar en un valle para seguir la travesía por la
mañana.
A mediodía, los dos hermanos ya
estaban en el bosque de la confusión. Nada más entrar en el bosque, encontraron
la dificultad que había para travesarlo. Ya que estaba lleno de lianas y
plantas muy frondosas, que formaban un laberinto. Los hermanos muy confusos de
cuál camino elegir, decidieron hacer un truco que habían visto a unos niños que
se habían perdido.
-
¿Y si usamos este hilo, como guía por si nos
perdemos? - propuso Hugo.
-
¡Buna idea! – exclamó Javi.
Con esto, los dos hermanos
consiguieron salir del bosque y se encontraron con un destello en medio de la
nada.
-
¿Has visto eso? – preguntó Javi.
-
Si. Crees que podría ser la piedra de la
juventud – dijo Hugo.
Los dos hermanos con gran
entusiasmo se acercaron al destello y se llevaron una grata sorpresa, porque
habían confirmado sus sospechas y habían encontrado la piedra de la juventud.
Con gran felicidad, se la
llevaron a su casa para convertirla en polvo y llevársela al sapo. El sapo al
verlos llegar se puso muy contento, ya que por fin podría ser como él era de
verdad. Como agradecimiento, el príncipe les convirtió a los dos hermanos en
caballeros de la corte. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.
CREACIÓN DE VERSO. ACROSTICO.
Palabra del acróstico
“AZUL”.
·
Con la A: Vi
el mar a través de tus ojos.
·
Con la Z: Pinté en el lienzo un cuenco de arándonos
·
Con la U: Su
último deseo era entregarme aquel zafiro.
·
CREACIÓN DRAMÁTICA.
Era sé una vez, en un castillo
localizado a la orilla del mar, todos sus miembros se estaban preparando con
entusiasmo para las navidades, menos la pequeña princesa que no estaba muy
segura de ello.
-
Princesa:
¡Mamá! Yo no quiero que llegue las navidades, no me gustan.
-
Reina:
Pero… ¿Por qué no te gustan? Si son muy divertidas. Siempre bailamos, comemos
dulces típicos y, además, Santa Claus nos trae muchos regalos.
-
Princesa:
Es por eso que no me gustan. Porque Santa, no me trae todo lo que pido y los
regalos que me traen son de niños pequeños.
-
Reina:
Bueno no te preocupes por eso. La navidad no es solo los regalos. Sino
compartir las fiestas con los seres que más queremos.
-
Princesa:
Pero eso es muy aburrido ¡Sino nos vemos todos los días!
Después de esto, la princesa se
fue corriendo a sus aposentos, donde se tiró a la cama llorando.
-
Princesa:
¡Yo no quiero compartir las fiestas, yo quiero mis regalos!
De repente, escucha que una voz
dulce y aterciopelada la está llamando desde fuera de la ventana. La princesa
al escuchar esa voz, abrió la ventana para ver de quien procedía esa voz.
-
Princesa:
¿Quién me está llamando?
-
Hada:
Yo.
-
Princesa:
Ala si eres un hada madrina. ¿Qué haces tú aquí? ¿Por qué conoces mi nombre?
-
Hada: Estoy
aquí para ayudarte a que comprendas, por qué Santa Claus no te puede traer
todos los regalos que quieres.
-
Princesa:
Espera un momento... ¿No te habrá mandado mi madre? ¿Verdad?
-
Hada:
no, tu madre no sabe nada de que estoy aquí. Que me dices, ¿Te apuntes?
-
Princesa:
¡Pues claro que sí!
Una vez dicho esto, el hada hizo
un haz de luz que envolvió a la princesa y se teletrasportaron a un lugar con
mucha nieve y con animales extraños para la princesa.
-
Princesa:
Hada, ¿En dónde estamos?
-
Hada:
Estamos en el Polo Norte, donde vive Santa Claus.
-
Princesa:
¡Enserio! ¡Hemos venido a conocer a Santa Claus y a por mis reglaos!
-
Hada:
Sí y no.
-
Princesa:
No he entendido lo que has querido decir.
-
Hada:
Hemos venido a que conozcas a Santa, pero no hemos venido a por tus regalos.
-
Princesa:
¡Jo!
-
Hada:
Vamos a preguntarle a ese pingüino de ahí por si sabe dónde está la casa de
Santa Claus.
-
Princesa:
¿Qué es un pingüano?
-
Hada:
“pingüano” no, es pingüino. Un pingüino, es un ave que vive en zonas muy frías.
Una vez aclarado la duda de la
princesa, ambas se dirigieron hacia el pingüino.
-
Princesa:
¡Buenas tardes seños pingüino!, sabes por dónde es la casa de Santa Claus.
-
Pingüino:
¡No me llamas seños, que todavía soy muy joven! Pues veréis, estáis de suerte.
Soy amigo de Santa Claus y os llevaré hasta él.
-
Hada:
Muchas gracias….
-
Pingüino:
Coti.
A lo largo de
la travesía, los tres aventureros se conocieron aún más. Pero de repente escucharon
un fuerte rugido.
-
Pingüino:
¿¡Habéis escuchado eso?!
-
Hada y
Princesa: sí.
-
Pingüino:
creo que viene de ahí (señalando una
cueva). Vamos a ver.
Los tres muy animados se
acercaron a la oscura cueva, pero cuando quisieron entrar se llevaron un gran susto.
-
Pingüino,
hada y princesa: ¡Aaaaaah!
-
Pingüino:
no temáis, es mi amiga lola la osa. ¿Qué tal estas?
-
Lola osa:
muy bien, aquí echándome una siesta y ¿Vosotros a donde vais?
-
Hada:
vamos a la cada de Santa Claus.
-
Lola la
osa: ¡Qué bien! ¿Me puedo unir con vosotros?
-
Princesa:
Por supuesto que sí. ¡Vamos!
Al cabo de un tiempo muy largo,
llegaron a una especie de casa muy grande, donde ponía en un gran letrero:
“TALLER-CASA DE SANTA CLAUS”. Al ver este letrero, los cuatro entraron y se
llevaron una grata sorpresa.
-
Santa
Claus: ¡Bienvenidos a mi dulce hogar! Os estaba esperando.
-
Princesa:
¿A sí?
-
Santa
Claus: Pues claro, por eso soy Santa Claus. Todo lo sé. Y ahora bien
¿Queréis un tour por mi taller?
-
Todos:
¡SI!
Santa Claus, les llevo por todo
su taller y a su misma vez les explicaba cómo funcionaba el reparto de los
regalos y les presentó a sus amigos elfos. Una vez acabado el tour, se dirigió
a la princesa.
-
Santa
Claus: ¿Puedo preguntarte, por qué no te gusta la navidad?
-
Princesa:
Pues… es que todos los años pido muchos juguetes, pero nunca me traes todos los
que pido.
-
Santa
Claus: jajaja. Eso tiene una explicación. Verás, no te traigo todo los que
pides porque hay muchos niños que no tienen juguetes para jugar. Entonces si te
doy todos los regalos que pides, ellos no tendrán para jugar.
-
Princesa:
Entonces… ¿Estoy compartiendo mis juguetes con otros niños?
-
Santa
Claus: sí.
-
Princesa:
¡Me parece una buena idea!
Desde ese momento, la princesa se acordó de lo
que le dijo su madre y comprendió que ella tenía razón. Después de esto, el
hada y la princesa se despidieron de sus amigos del Polo Norte, porque era la
hora de irse a la cama, para que Santa Claus pueda salir a entregar los
regalos.
A la mañana siguiente, la
princesa se despertó con el ruido de los pájaros y se dio cuenta de que todo lo
que había pasado era un sueño. Como un resorte, se levantó de la cama y se fue
corriendo por las escaleras, buscando a su madre.
-
Princesa:
¡Mamá! ¡Mamá!
-
Reina:
Dime.
-
Princesa:
Tenias razón, sobre la navidad. La navidad es mucho mejor compartirla con los
demás que los regalos.
-
Reina:
Me alegro mucho, de que puedas comprenderlo. Y ahora ve a desayunar, que
¡Tenemos que abrir los regalos!
-
Princesa:
¡Vale!
Finalmente, esas navidades la
princesita recibió todos los regalos que había pedido. Pero en ese momento
recordó el sueño y las palabras de su madre, por lo que decidió dar la mitad de
sus regalos a los niños que no tenían con que jugar.
FIN.
Por último, quiero presentar el
libro, del cuento anteriormente citado: La piedra de la juventud.
Hola Laura! primero felicitarte por la creación de los diferentes textos, son muy originales y están muy bien. Solo quería puntualizarte que yo he echado en falta algo de teoría o relacionar esta entrada con la teoría correspondiente a este bloque así como que tipo de estrategias has usado para la creación de los textos, como bien esta explicado en el bloque 3, las estrategias de Rodari u otras.
ResponderEliminarTambién me hubiese gustado ver en tu entrada que te ha aportado este bloque a ti o que es lo que has aprendido o si te ha costado realizar alguna de las creaciones o no.
Espero que mi comentario te sirva de ayuda para completar tu entrada
Un saludo,
Vanesa
Completamente de acuerdo, Vanesa.
EliminarLaura, los argumentos para la adecuación de los textos a la edad de los receptores son muy pobres y superficiales. Recuerda en lo que nos fijábamos al analizar un libro en el bloque 1: tema, estructura, identificación con los protagonistas y de los personajes en el contexto real de los receptores, lenguaje... Usa criterios psicopedagógicos y no generalidades relacionadas con supuestas capacidades.
ResponderEliminarTienes que explicar también qué estrategia has escigido en cada caso.
Has colgado las páginas, pero eso no es un libro. Hace falta una portada y una encuadernación y que expliques lo que has tenido en cuenta para asegurar que es resistente y seguro para los niños.
También faltan la conclusión y las referencias.